3. LA IMPORTANCIA DEL ESTIÉRCOL EN NUESTRO ECOHUERTO. EL PRIMER ABONADO DEL TERRENO.

    Para poder estudiar la influencia del alimento proporcionado a nuestras plantas del huerto de invierno, creamos tres bancales diferentes en los que pusimos diferentes proporciones de estiércol en cada una. En el primer bancal pusimos estiércol abundante, mientras que en el segundo echamos la mitad y en el tercero no echamos nada, con la intención de echar humus de lombriz. De esta manera podremos comparar en su día, la diferencia de crecimiento entre unos bancales y otros, a pesar de que en la zona sin estiércol pusimos las plantas de col y brócoli más grandes y hermosas que venían en la bandeja del vivero.

    El estiércol que empleamos era una mezcla de gallinaza con viruta que llevaba compostando desde marzo en el Tudal (lo echamos el 15 de octubre). Proviene de la granja de avicultura ecológica Decorral, por lo que no contiene químicos, transgénicos u otros elementos artificiales. La viruta, que la usan para la cama de los pollos, servirá como base para mejorar la tierra en próximas temporadas, de manera que se vaya poco a poco construyendo un suelo fértil en el patín.


Hay un aforismo que dice:

“El mal agricultor produce hierbas.

El agricultor mediocre produce frutos.

El buen agricultor produce suelo.”

 

    Y en eso estamos, produciendo suelo.

    Jesús Castañar, profesor de Geografía e Historia y coordinador del proyecto del Ecohuerto.





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